El nuevo aeropuerto de Murcia, terminado y cerrado un año después
Setenta millones de euros impiden la apertura del nuevo aeropuerto de
Murcia, en Corvera. Ésa es la cantidad que la Comunidad Autónoma adeuda a
AENA y que impide que ésta se haga cargo de la gestión de la nueva
instalación, que está completamente terminada y a la espera de su
inauguración desde hace casi un año. Además, están pendiente de
devolución los 200 millones de euros que el Gobierno regional de Ramón
Luis Valcárcel avaló para que un grupo de bancos liderado por el
portugués Espirito Santo financiara la construcción del aeródromo, a
cargo del consorcio privado Aeromur, liderado por Sacyr y El Pozo.
La respuesta que el Gobierno de la nación dio el tres de diciembre
pasado a una pregunta de dos diputados socialistas murcianos en el
Congreso, Pedro Saura y María González, no puede ser más clara: antes de
abrir el de Corvera, “primero es necesario resolver los problemas
técnicos relativos a la gestión del espacio aéreo y los relativos a las
inversiones de AENA pendientes de amortizar en la base aérea de San
Javier”.
Los “problemas técnicos”, consistentes en la reordenación de pasillos
aéreos para que el tráfico civil no entorpezca el militar, ya quedaron
resueltos en la Comisión Interministerial Defensa-Fomento el pasado 11
de diciembre, ocho días después de la respuesta gubernamental, aunque la
tramitación exige su pase a información pública comunitaria, que no
quedará resuelta hasta la primavera.
Queda, por tanto, pendiente la devolución a AENA del dinero que gastó en
reacondicionar San Javier con una segunda pista de aterrizaje, una
nueva torre de control, un estacionamiento, etcétera: setenta millones
de euros cuya inversón decidió el gobierno de José María Aznar, con
Álvarez Cascos en Fomento y Federico Trillo en Defensa, mientras el de
Murcia, también del PP, decidía por su cuenta y riesgo apostar por el
nuevo aeropuerto “internacional” privado en Corvera y encargárselo a un
holding encabezado por Sacyr que, entonces, todavía estaba dirigido por
Luis del Rivero, murciano de pro que ha realizado numerosas y jugosas
obras públicas en su tierra natal. La nueva instalación está situada a
unos 20 kilómetros en línea recta de San Javier y otros 70 del
internacional de Alicante.
Aena ha puesto como condición para hacerse cargo de la gestión del nuevo
aeródromo que le sea resarcido el dinero que gastó en San Javier hasta
el año pasado, cuando se inauguró la segunda pista y el resto de
mejoras. Si no, no se trasladará a Corvera con las aerolíneas que operan
en San Javier y el resto de servicios aeroportuarios.
Fuentes de Aeromur, consorcio constructor y propietario de Corvera
formado por Sacyr, ElPozo, Cajamurcia y otros inversores privados,
aseguraron a El Confidencial que “se está negociando” ese asunto. Y
respondieron que, efectivamente, todo está terminado y bien terminado en
el nuevo aeropuerto desde un año, a la espera de entrar en
funcionamiento.
Fuentes de la Consejería de Economía y Hacienda de Murcia, que dirige
Juan Bernal, aseguraron también ayer por escrito a este diario que “en
los presupuestos de la Comunidad Autónoma para 2013 [aprobados en
diciembre pasado] no está recogida ninguna partida destinada a AENA,
como compensación a sus inversiones en el aeropuerto de San Javier, ni
está previsto que se incluya”.
Además, apremian los plazos para devolver al holding bancario liderado
por el Espirito Santo portugués los 200 millones que sirvieron a Aeromur
para construir el aeropuerto y que fueron concedidos gracias a un aval
de la Comunidad Autónoma.
De hecho, ya se han cumplido las condiciones que puso Espirito Santo
para ejecutar ese aval. La primera, que el aeropuerto no hubiera entrado
en funcionamiento en 2012. La segunda, que dos empresas de rating
hubieran bajado el nivel de la deuda que la Comunidad Autónoma tenía en
2008, cosa que tampoco se cumple pues la calificación actual es de
nivel “bono basura”. Moody's calificó así la deuda de la Comunidad
Autónoma de Murcia en mayo de 2012. Sin embargo el consorcio bancario no
ejecuta el aval y prefiere esperar mientras que Aeromur siga pagando
los intereses de la deuda, estiman fuentes económicas.
En cualquier caso, la devolución total del préstamo debe terminar en
2015 para que el aval no sea ejecutado y existen serias dudas de que
Aeromur vaya a tener tiempo para poder generar suficiente negocio en el
aeropuerto de Covera, cuando consiga ponerlo en funcionamiento, y pagar
el empréstito. La primera piedra de la instalación se puso en julio 2008
y se anunció que los primeros vuelos serían para el año 2010. A día de
hoy, no parece haber muchos motivos para creer que empezará a operar a
final de esta primavera, como ha anunciado recientemente el presidente
Ramón Luis Valcárcel.
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