ACS pincha en hueso: pierde con sus acciones cinco veces el sueldo del consejo

ACS pincha en hueso: pierde con sus acciones cinco veces el sueldo del consejo

LOS GESTORES COBRAN LO MISMO PESE A LAS PÉRDIDAS DE 2012

ACS siempre fue una de las compañías más hábiles a la hora de manejar su autocartera. Históricamente, la compañía presidida por Florentino Pérez le sacó un gran partido a la compra y venta de sus propias acciones. Pero el pasado año pinchó en hueso, hasta el punto de que perdió 51 millones de euros intentando que su cotización no bajara más en bolsa. Una cantidad que supone casi cinco veces lo que pagó al consejo de administración.

Así consta en el informe de gobierno corporativo que la constructora ha enviado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) tras la celebración del consejo de administración que ha aprobado la vuelta al pago del dividendo. Como adelantó El Confidencial el pasado martes, ACS va a proponer retribuir con 1,15 euros a sus decepcionados accionistas el próximo mes de julio, una buena noticia tras la suspensión del pago tradicional de febrero.

El abono se hará en metálico o en acciones (scrip dividend) a elección de los inversores, tal y como ya ocurrió el verano pasado, la primera vez que el holding participado por los March, los Albertos y los Fluxá plantearon esta opción para proteger la depauperada caja del grupo. En 2012, cerca del 65% de los accionistas eligió cobra en cash, especialmente porque todos los miembros del núcleo duro citados anteriormente no dudaron en coger el dinero en metálico.

Esa buena nueva contrasta con lo que le ha costado a ACS tratar de mantener artificialmente el precio de la cotización. La compañía perdió 51,1 millones de euros comprando y vendiendo acciones propias en el peor año bursátil de su historia. La cotización se hundió hasta los 10 euros en julio, cuando los temores a una ruptura del euro y al rescate soberano de España arrecieron sobre las empresas con peor situación financiera. La venta forzada de su participación en Iberdrola animó a los bajistas a ponerse cortos.

ACS llegó a tener el 6,4% de su capital en autocartera, participación que vendió el pasado mes de enero con la colocación acelerada de 20,20 millones de euros. Las traspasó a un precio de 17,83 euros por título, casi a la mitad del valor al que las tenía contabilizada en su balance. La operación supuso unos ingresos de 360 millones de euros para ACS, que tenía contabilizadas esas acciones a 34,295 euros. Por ese motivo, la sociedad tendrá que registrar este ejercicio otras pérdidas adicionales de más de 150 millones.

Ese el precio al que Florentino Pérez admite haberlas comprado cuando el presidente del holding dio orden a su departamento financiero de subir el precio de la cotización adquiriendo títulos del propio grupo. Esa escalada coincidió con la finalización de los planes destock options para directivos a mediados de 2011, por los que los principales gestores se embolsaron más de 200 millones de euros.

En cuanto al consejo de administración, el pasado año cobró 10,4 millones de euros, prácticamente lo mismo que en 2011. La diferencia es que en 2012 la compañía acabó el curso con unas pérdidas de 1.900 millones, frente a los 962 millones que ganó en el ejercicio precedente.