éstos mismos jubilados no decían nada cuando los pisos (y los locales) subian y subían.. todos eran "más ricos".. y tampoco dicen nada porque ahora por el alquiler de un local minúsculo pidan 3000 Euros al mes.. así es imposible la actividad comercial,
tampoco decían nada cuando se construían "edificios singulares", se levantaban absurdamente las aceras, con el AVE, con las decenas de aeropuertos (y sus ampliaciones multimillonarias), y con otros despilfarros que el país no se podía permitir..
tampoco dicen nada porque por el alquiler de un piso pidan 800 Euros o más, cuando un trabajador normal no gana ni eso, y tiene que levantar a una familia..
y tampoco dijeron nada cuando los familiares se quedaron en paro, o cuando los que siguen conservando el empleo cobran un 30% o 40% menos.. y tampoco dicen nada cuando los más jóvenes se tienen que largar del país, porque no hay ni una posibilidad,
las pensiones aún tienen que bajar, un 30%, un 40%, en consonancia con la caída de la actividad económica y los salarios..
así que ahora, que disfruten lo votado.. como están haciendo todos en hispanistán..
Cinco mil jubilados gijoneses plantan cara a la congelación de sus pensiones
- Cientos de pensionistas colapsan la Seguridad Social con sus reclamaciones tras manifestarse por las calles del centro
- Los jubilados gijoneses, contra la congelación de las pensiones
Unos cinco mil pensionistas gijoneses han presentado durante la última semana reclamaciones ante la Seguridad Social para solicitar el abono de la revalorización de sus pensiones del pasado año, suspendida por el Gobierno por decreto ley el 30 de noviembre de 2012. Durante toda la mañana de ayer hubo colas a las puertas de la Seguridad Social, en la Plaza del Carmen, donde los jubilados sellaron los impresos en los que reclaman el cobro de atrasos por la desviación del IPC de enero a noviembre del año anterior.
Durante toda la semana, los pensionistas gijoneses han colapsado las oficinas del INSS, que se ha visto obligado a disponer de cinco funcionarios para atender y sellar las reclamaciones de los jubilados. Ayer, último día del plazo legal para la presentación de los recursos, las colas doblaban la plaza del Carmen y se extendían a lo largo de la calle Felipe Menéndez. Tal era la avalancha de ciudadanos en los oficinas del organismo dependiente del Ministerio de Trabajo que hubo que poner en las cristaleras del edificio administrativo el aviso de que la instalación sólo admite «una capacidad máxima de setenta personas».
A las diez de la mañana, con las oficinas del INSS ya saturadas, los jubilados habían mantenido una reunión informativa en el Antiguo Instituto, cuyo salón de actos se quedó pequeño para acoger a los pensionistas interesados en presentar reclamaciones contra la orden del Gobierno que impide la revalorización de las pensiones para 2013 y que en la práctica supone también no abonar a los pensionistas la «paga» compensatoria por el incremento de los precios durante el año 2012 .
La reunión informativa tuvo que repetirse, ya que buena parte de los afectados no pudo acceder al salón por falta de espacio. Estaban ocupadas las 130 butacas del recinto y había decenas de personas de pie en los pasillos. Otras tantas aguardaban en el patio del Antiguo Instituto sin poder escuchar a los promotores de la protesta, un grupo de jubilados no adscritos a organización sindical alguna.
Este grupo de personas, que conocieron «hace 16 días», en palabras de su cabecilla, Arturo Monteserín, un jubilado animoso al que le falta una pierna y que se mueve en una silla de ruedas con motor, que juzgados de Burgos y San Sebastián habían declarado ilegal la congelación de las pensiones, decidió organizarse y crear una plataforma de afectados, en defensa de la revalorización de sus pagas.
Tras la asamblea, varios cientos se manifestaron desde la Plaza del Parchís a El Carmen con carteles en los que se leía el lema «La pensión ye un derechu».
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